Soberanía energética ¿a qué costo?
Dr. Ricardo Morales Corral
El pasado 18 de marzo se llevó a cabo la “fiesta nacional de la soberanía energética”, convocada por el primer mandatario Andrés Manuel López Obrador, en la conmemoración del 85 Aniversario de la expropiación petrolera, sin embargo, caben algunos cuestionamientos ¿existe realmente una soberanía energética en México? ¿somos autosuficientes? ¿estaríamos en condiciones de poder fijar precios nacionales del petróleo y combustibles?
Liberación de precios
Hoy en día, el precio del diésel y las gasolinas en México no depende de voluntades políticas, sino del contexto económico global del cual forma parte nuestro país, por lo que a partir 2018, el precio del diésel y las gasolinas en México quedó “liberalizado”, es decir, está en función de las variaciones de precio del barril de petróleo a nivel internacional, por lo que, de acuerdo a la Comisión Reguladora de Energía , la liberación de precios de gasolinas y diésel se refiere a la determinación de precios bajo condiciones de mercado, es decir, precios definidos por la oferta y la demanda en cada eslabón de la cadena de valor
PEMEX endeudado
En meses recientes fueron anunciados diversos vencimientos de amortizaciones de PEMEX, por el orden de 17 mil millones de dólares, de acuerdo con el Plan de Negocios 2023-2027 de la Empresa de Participación Estatal, a lo cual el primer mandatario y el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O, afirmaron que “si PEMEX requiere apoyo, siempre estaremos detrás”.
Por su parte, el director general de PEMEX, Octavio Romero Oropeza, señaló que tendrán que pagar entre 5 mil 500 y 6 mil millones de dólares por amortizaciones de la deuda durante el primer trimestre de 2023, es decir, antes del mes de abril.
Caída de la recaudación de IEPS.
Durante 2022, debido al incremento en el precio del barril de petróleo a nivel internacional y como una medida para contener el incremento de la inflación, se otorgaron una serie de estímulos fiscales al IEPS del diésel y gasolinas, lo cual provocó el desplome en la recaudación de IEPS, mostrando inclusive una recaudación negativa, ya que no solo no se llegó a la meta en programada, sino que, al otorgar un subsidio por el excedente del impuesto causado, el Estado perdió, provocando un efecto colateral reflejado en la suspensión de participaciones de IEPS de gasolinas a las Entidades Federativas durante varios meses de 2022.
Dos bocas y Deer Park
La refinería Olmeca-Dos bocas prometía estar produciendo para 2022 en promedio 2,320 millones de barriles de petróleo diarios y para 2023 más de 2,500, sin embargo, hoy se observa une refinería “inundada” y sin rumbo, donde a pesar de haber sido inaugurada, aún no refina, solamente se le inyecta recurso público extraordinario, y en el caso de Deer Park “un cascaron” que no ayuda a mejorar las finanzas de PEMEX.
Finalmente
La apuesta de la actual administración federal para el rescate económico de México, sigue siendo la generación de energías fósiles, en vez de apostarle a energías renovables, tal pareciera que estamos atrapados en el México de los años 80´s, en medio de “la bonanza petrolera”, donde existían otras condiciones, se le apuesta a proyectos costosos y poco rentables de refinerías como Deer Park y Dos Bocas, cuando la tendencia a nivel global son los vehículos eléctricos, no los de combustible, por lo que cabe el cuestionamiento si ¿existe una soberanía energética?.